Feijóo sin mancha del barro de Sánchez y Milei
Alberto Núñez Feijóo.
El gobierno de los líos sanchista quiso pringar de aceite a Alberto Núñez Feijóo para que se tirase al barrizal en el que Pedro Sánchez y Javier Milei pelean. Sin embargo, el presidente del PP ha salido bien airoso de la sesión de lucha. Más aún, en realidad, es quien mejor ha quedado en este desorbitado juego de egos.
La posición, equilibrada y cargada de sentido común del presidente del PP lo ha colocado, a ojos de los españoles, como un político sensato, centrista, capaz de guardar la compostura y la cordura cuando más enloquecido está el ambiente a su alrededor. Nada que no se supiese, pero que vuelve a demostrarse.
Vivimos días, en los que la desmesura de Sánchez por buscar situarse ante los focos, agobiado por desviar la atención de los temas polémicos que le acucian, hace difícil ser coherente. Pues bien, Feijóo ha ganado esta partida y su figura de líder sale bien reforzada.
Suele decirse eso de “más vale solo que mal acompañado”. Y para el caso que tratamos, desde luego, es un buen consejo. Feijóo no podía fotografiarse ni con Sánchez ni con Milei. Ambos han perdido la razón inflamando una descortés disputa que no conviene a España ni a Argentina y crea desazón entre dos pueblos hermanos.
La caminata desesperada de Sánchez para merendarse al votante a la izquierda del PSOE, le abraza a las formaciones populistas que se regocijan en el lodazal. La postura de Feijóo, agarrado más si cabe la moderación, amplía su estampa en un país tan deseoso de cerrar esta etapa de constante frentismo en el mundo de la política.A.M.BEAUMONT