Problemas en el Gobierno
Ni amnistía a Puigdemont ni investidura de Illa: Sánchez en claro peligro de elecciones
La maquinaria electoral del PP está, por el momento, en "stand-by" pero no descartan tenerla que activar en breve. Y es que el Gobierno de Pedro Sánchez está cada vez más débil.
Es probable que el Tribunal Constitucional, evidentemente favorable a los intereses de Pedro Sánchez -la sistemática mayoría progresista de 7 a 4 que se impone en cada votación así lo avala-, presidido por un claro e histórico afín al PSOE, Cándido Conde-Pumpido, enmiende la plana a un Tribunal Supremo que lo ha dejado claro: no se puede amnistiar el delito de malversación ya que hubo lucro personal al haber sufragado el ‘procés’ con dinero público y no con dinero privado.
La orden de detención de Carles Puigdemont, por tanto, sigue vigente y muy probablemente, ante la gravedad del delito que se le imputa, sea detenido si pisa suelo español. En todo caso, tras un recurso de reforma ante el Tribunal Supremo, cabe por parte de la defensa del Molt Honorable President -y compañía- un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. Se trata de la última gran baza. Pero la desconfianza de Puigdemont ante o un timo de Sánchez o una chapuza de Ley de Amnistía, o ambas cosas a la vez, es palmaria.
Por otra parte, y para mayor disgusto del presidente del Gobierno, Salvador Illa no es President de la Generalitat tras haber ganado los recientes comicios catalanes del 12M, y tampoco -al menos por el momento- hay visos de que así lo vaya a ser. ERC ya le ha lanzando un órdago y, además, de máximos. Así, por mucho que quiera, legalmente no es tan fácil -más bien imposible- otorgar ya no la financiación singular a los independentistas catalanes sino, como exigen, la soberanía fiscal. No lo tiene, en suma, fácil el candidato del PSC. Además, no es descartable, más allá del escenario de bloqueo y consecuente repetición de comicios en Cataluña, el que ERC y Junts busquen la fórmula de articular un Gobierno y manden a Salvador Illa a la oposición.
Y la conclusión es evidente. Sin amnistía y sin el Salvador Illa president, al ya de por sí muy débil Gobierno de Pedro Sánchez no le quedará más gasolina: no le quedará otra que convocar elecciones generales anticipadas. Y en el PP lo saben. La maquinaria electoral del número trece de la calle de Génova está, por el momento, en ‘stand-by’ pero a punto de pasar a ‘on’.