Los trenes se paran por culpa del PP y de Franco
Un cartel con los trenes "demorados", en la estación de tren de Chamartín
¿Se imaginan la que estaríamos viviendo si el desastre de los ferrocarriles hubiese sido con un gobierno del PP? Indescriptible. La bronca sería terriblemente sonora. La izquierda en pleno acusando al ministro de turno de destrucción de lo público para entregárselo a empresas privadas. X ardería. Las televisiones “progresistas” emitiendo en directo el drama familiar de los viajeros.
Sin embargo, Pedro Sánchez lleva seis años en La Moncloa. Renfe y Adif han sido dirigidos por ministros del PSOE este tiempo, entre ellos José Luis Ábalos y Óscar Puente, ambos personas muy próximas al presidente. Así que toca encogerse de hombros a todos los que enseguida enarbolan pancartas a favor de la gente, cuando no son los suyos los que gobiernan.
La culpa de todo es del PP por no haber acometido en su día la renovación de trenes. Faltaría. Este es siempre el primer punto del catón de auto-disculpa sanchista y el crack Puente no iba a defraudar en su comparecencia en el Senado este viernes: había que tirarle los trastos a la cabeza de Alberto Núñez Feijóo.
Luego vino sacar pecho: “El tren vive en España el mejor momento de su historia”. ¿Pero no era un fiasco por las políticas austericidas de los populares? Por supuesto, el éxito es gracias al mismo Puente y a Sánchez. Y, para terminar otros dos clásicos más del mix del aparato de agitación y propaganda monclovita. Las imágenes de caos en las estaciones son bulos junto al rotundo colofón antifranquista: “Solo me ha faltado escuchar que con Franco los trenes iban mejor”. A Oscar Puente no puede negársele desparpajo. Tampoco que su ministerio, por lo visto, ha sido un antro de corrupción. A.M.BEAUMONT