Lo que le faltaba a Sánchez: Ábalos tiene "sed de venganza" y declara la 'guerra' a Óscar Puente

El que fuera ministro de Transportes hasta el estallido del ‘caso Koldo’, José Luis Ábalos, está con “sed de venganza”, tal y como lamentan fuentes del PSOE. Y claro que tiene manta para tirar. El exministro de Sánchez todavía no ha digerido su cese “sin explicaciones”, tal y como asegura Ábalos, se siente “decepcionado”, y la gota que ha colmado el vaso, tras su sonada expulsión -por orden de Sánchez- del Grupo Parlamentario Socialista, es la auditoría interna encargada por el actual titular de la cartera, Óscar Puente. Una auditoría que apunta a una orden firmada por Ábalos que duplicó la cantidad de la compra de mascarillas - cuatro a ocho millones de mascarillas- en “tan solo 38 minutos”.

La reacción de Ábalos no se ha hecho esperar. En un palmario tono de advertencia, porque “sabe cosas”, reconocen fuentes socialistas, y a pesar de que -por el momento- tan solo se limite a amenazar con su necesario voto en el Congreso, ha preguntado el exministro en conversación con ‘El Independiente’ "¿por qué no se hace una auditoría en el Ministerio de Sanidad, o en el Ministerio del Interior, o en las Comunidades Autónomas?". Es más, se pregunta el otrora, recordemos, persona de la máxima confianza de Pedro Sánchez tanto en el PSOE -como secretario de Organización- como en el Ejecutivo, “¿por qué Puente no audita las mascarillas que él mismo le compró a un amigo?”, poniendo el foco en su sucesor que fue investigado por contratar casi 200.000 euros en mascarillas como alcalde de Valladolid con un amigo que al verano siguiente le invitó a su yate en Islas Baleares.

Ábalos no tiene nada que perder, está sin chófer y “sin secretaria” -como él mismo dijo-, tiene sed de venganza e información. Es evidente. Y todo esto en el momento de mayor debilidad de Sánchez, con un Puigdemont -y sus 7 imprescindibles votos de Junts en el Congreso-, también, con hambre de revancha tras el pacto del PSOE con ERC para investir en Cataluña al nuevo president Salvador Illa. Veremos si el presidente del Gobierno, con este caldo de cultivo, consigue, o no, escribir un nuevo capítulo en su ‘Manual de Resistencia’.