Los niños negros muertos que no conmueven a Sánchez

El fracaso como ministro de Fernando Grande-Marlaska se está convirtiendo en escándalo. Este lunes ha sido el Tribunal Superior de Justicia de Canarias quien ha advertido del colapso con la migración y solicita soluciones. La situación es insostenible y el ministro del Interior, máximo responsable junto a Pedro Sánchez, no mueve un dedo para resolverla.

Peor todavía, da la impresión de que cualquier decisión que se adopta fuese en la senda de agravar todavía más la crisis. Ni siquiera el último naufragio en El Hierro (con más de medio centenar de víctimas, niños incluidos) ha removido la conciencia de Sánchez para pronunciarse. El presidente ha guardado un silencio cómplice. Vergonzoso. Ningún ministro (salvo el canario de Política Territorial, Ángel Víctor Torres) ha telefoneado al presidente de Canarias, Fernando Clavijo, para expresarle sus condolencias. Llamativo.

Vista la inacción gubernamental sobre la migración, bien parece que desde La Moncloa se haya elaborado una estrategia para que este tema inflame la preocupación de los españoles a medida que pasan los días y la bola de nieve crece. Se está creando un problema social con la emigración en España que jamás ha existido, precisamente, porque a quien beneficia que se caliente el asunto es a una fuerza como Vox, que los estrategas monclovitas utilizan, una y otra vez, para mantener a raya en los sondeos electorales al PP de Alberto Núñez Feijóo. ¿Estos muertos parecen menos muertos a Sánchez y Marlaska porque les convienen electoralmente? Es imposible contestar sí, desde luego. Pero, hay silencios que hablan por sí solos. 

A. M. BEAUMONT