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Begoña Gómez, Pedro Sánchez y Pedro AlmodóvarRAUL TERREL

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Hace unos días el director cinematográfico Pedro Almodóvar se deshacía en elogios hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmando que era el más "guapo" y que había que "pedirle muchas cosas tanto a nivel político como físico". Supongo que entre las cosas que el director manchego le pedirá en las próximas horas a su adorado ídolo será el informe de la UCO de 233 páginas para utilizarlo de guion en su próxima película: 'Socialistas al borde un ataque de nervios'.

"Guion basado en hechos reales", según la terminología cinematográfica, relacionados con los delitos de corrupción en los negocios, tráfico de influencias, organización criminal, blanqueo de capitales, cohecho, prevaricación, falsedad, contrabando de oro, delitos contra la Hacienda Pública, delitos contra la Administración de Justicia por la filtración de la investigación a los delincuentes, entre otros presuntos delitos que sin duda irán surgiendo. Un paseo por la mayor parte de los artículos del Código Penal, un argumento apasionante.

Esta nueva cinta cinematográfica de la saga Almodóvar tendrá como comienzo una moción de en la que un actor afirme mirando directamente al presidente guapo, "hay que acabar con la corrupción" y a renglón seguido sonaría la música de la serie norteamericana Los Soprano, que narra la historia de una organización criminal.

La historia que contará Almodóvar en la película que estará deseando rodar será la de un presidente guapo que presuntamente sabía y tapaba cómo actuaba una organización corrupta, que daba el visto bueno a la visita ilegal de una vicepresidenta de un país caribeño perseguida en Europa por violar los derechos humanos y que venía a España con maletas repletas de oro, ni más ni menos que 104 lingotes, y que permitió que se organizara una red corrupta desde los ministerios de su Gobierno que se dedicaron presuntamente a corromper a empresarios. Es decir, que la corrupción presuntamente nacía en la Administración e iba desde dentro hacia fuera aprovechando que los ciudadanos estaban encerrados por la pandemia y los controles se habían relajado debido a la confusión de la situación. Un argumento apasionante digno de un Oscar de Hollywood.

También esa futura película contará las peripecias de la presidenta de una comunidad autónoma insular que daba el teléfono de su consejera de sanidad al encargado de la organización y, a pesar de que negaba conocerlo, éste le llamaba "cariño". Además, el amigo de la mujer del presidente guapo pagaba presuntamente el alquiler del piso de la amiga del que afirmó que su máxima tarea era combatir la corrupción y para eso había que hacer presidente al guapo de la película. Un poco enrevesado pero apasionante por ese aspecto picante y sensual tan almodovariano.

Mientras tanto, se intercalarán secuencias de miembros de la organización llevando bolsas a la sede del partido del que es jefe el protagonista de la película. Seguro que para subir la emoción de la escena uno de los actores dirá, utilizando un plano corto de los que le gustan a Almodóvar, "llevamos 90.000 euros a Ferraz porque Aldama no podía, fueron dos pagos en efectivo en octubre de 2020 y los llevamos en una bolsa de plástico", y posteriormente, uno de los silencios dramáticos propios de las películas del director manchego.

Para rodar la película tendrán que utilizar como lugar de rodaje ocho ministerios, las sedes de los gobiernos autonómicos de Baleares y Canarias, el Palacio de la Moncloa y la calle Ferraz de Madrid, además del Congreso de los Diputados y como decorado bolsas de dinero, fotos de mordidas y tratos de favor.

El guion es digno de Almodóvar y cuando el director oscarizado busque los actores y actrices para que lo interpreten seguro que escogerá a algún miembro de la familia Bardem, tan encantados de representar personajes de tramas corruptas, o a Marisa Paredes, actriz que se ha especializado en expulsar de los tanatorios a políticos, con su verbo florido de lideresa anticorrupción.

En fin, muchos estaremos esperando el estreno de la película, la cual en su propaganda llevará la frase "basada en hechos reales", para dar mayor énfasis al guion, llevando como subtítulo de la película la frase de Paul Park: "La corrupción odia lo que no está corrupto". Seguro que es candidata a los Oscar porque la trama es apasionante.