Sánchez y su golpe de mano en TVE: decreto que aísla al PP y da al Gobierno y sus socios el control absoluto

Golpe de mano de Pedro Sánchez en TVE para tomar el control absoluto y aislar al PP. No hay día sin su línea roja traspasada y este martes le ha tocado al ente público RTVE con un decretazo monumental aprobado por el Gobierno. Vamos a explicarlo rápidamente: ahora mismo el Consejo de Administración está compuesto por 10 miembros, de los que actualmente 6 tienen el mandato caducado, pero PP y PSOE no se ponen de acuerdo para renovar esos puestos que deben ratificarse por mayoría de dos tercios.

Con esta situación, Sánchez ha decidido entrar al asalto, cambiando las reglas de juego en mitad de la partida y a su conveniencia, claro. ¿Qué ha hecho? Pues muy sencillo, ha aumentado el número de consejeros de 10 a 15, 11 elegidos por el Congreso y 4 por el Senado. Y además ha rebajado los votos necesarios para nombrarlos de dos tercios a mayoría absoluta. Así la mayoría de la investidura podrá nombrar en el Congreso a 11 de los 15 consejeros y el PP se tendrá que conformar con los 4 que elige el Senado. Es decir, se quedará sin capacidad de veto, en franca minoría frente a Sánchez y sus socios, que tendrán un control absoluto de RTVE.

Un asalto en toda regla que el ministro Óscar López nos vende como la TVE "más plural de la historia". Es verdad, habrá mucha pluralidad, la misma de la investidura: 11 de los consejeros van a ir a parar al PSOE, a Sumar, al PNV, a Bildu y a Podemos, con el PP en franca minoría. ¡Toma pluralidad! ¡Menudo cinismo! El cemento armado armado es plastilina al lado de cara dura del ministro.

En realidad hay que reconocer que este asalto de Pedro Sánchez sorprende entre poco y nada. Ya estamos más que acostumbrados a ver cómo mete sus zarpas en multitud de instituciones y organismos públicos: el CIS de Tezanos; el Banco de España con el ministro Escrivá como gobernador -algo que no se veía desde Franco-; la Fiscalía General con un fiscal entregado a la causa e imputado; la Abogacía del Estado actuando como el bufete particular de Sánchez; el Tribunal Constitucional, con un exministro de Justicia y una alto cargo de Moncloa, etc, etc...

Nada escapa al control absolutista de Sánchez que está dejando en pañales la democracia española. Pero aunque no sorprenda no hay que dejar de denunciarlo. Un tipo capaz de comprar su investidura a un prófugo de la Justicia con una amnistía que borra sus delitos es capaz de cualquier cosa. La pregunta es qué será lo próximo