Sánchez: “Doctor, por la noche veo ultras”

La obsesión que tiene Pedro Sánchez con los ultras no le deja vivir. El presidente, mire donde mire, se topa con ellos. En las calles, en la política, en los juzgados, los que acusan a su amada, Begoña Gómez... Quienes no se colocan a su popa. En realidad, como siga estirando ese carrete va a terminar dirigiéndose en sus discursos a los ultras en lugar de a los españoles. 

Ahora, resulta, que esos grupos de facinerosos organizados para atacar al mandamás socialista cuando fue a Paiporta con el Rey y Mazón, pues, según la Guardia Civil que lo investiga, no existen. De los vídeos grabados de quienes protestaban enérgicamente, se desprende que eran vecinos de la zona y voluntarios, lógicamente, indignados. Sánchez olvida siempre que la gente tiene derecho a estar enfadada con los políticos, con “Su Sanchidad”, con sus cambios de opinión y su toma de decisiones siempre calculada para que, si alguien sale ganando, sea él. 

Hace mucho ya que Pedro Sánchez no es un hombre querido entre los españoles. No fue capaz de ganar las elecciones el verano de 2023, pese a ser presidente del Gobierno y contar con el enorme trampolín que le da estar en La Moncloa a cualquier candidato. En realidad, Sánchez, conocedor de su hándicap, nunca ha planteado una campaña en positivo, siempre ha salido pidiendo el voto para que no gane el PP, es decir, según su escuálida visión, para que los ultras no gobiernen nuestro país.

A. M. BEAUMONT