La herencia envenenada de Enric Hernández: los Telediarios en mínimos históricos
El nuevo presidente de TVE tiene trabajo tras años de manipulación y descrédito que quiere remontar sin Cintora ni Hernández y con dos nombres clave: Del Cerro e Idígoras.
Se acerca el examen mensual de las televisiones y en la cadena pública no les llega la camisa al cuello. A pesar de haber laminado al director de Información y Actualidad, Enric Hernández, Pérez Tornero va a tener que lidiar con un fardo muy pesado. Y es que los resultados de mayo no son nada buenos.El cierre de mayo pinta nefasto para La 1 de TVE en su vertiente informativa. Las audiencias mensuales, el examen que pasan las televisiones cada mes, pinta en bastos para la cadena pública, que va camino de cerrar mayo en mínimos históricos, y no sólo como canal.
Los Informativos de La 1 de TVE se encuentran más hundidos que el Titanic, en torno al 10% de audiencia media frente al liderazgo de Antena 3 Noticias (que, presumiblemente, rozará el 20%) y a muchísima distancia de Informativos Telecinco (en torno al 14%).
El hundimiento del Telediario
De esta forma, el célebre ‘Telediario’, que en otro tiempo pasaba por ser la gran referencia informativa de la jornada, puede encontrarse al cierre de mayo con el peor dato de su historia gracias, en gran parte, a la gestión de Enric Hernández, ya cesado como director de Información y Actualidad.
Las hay que buscarlas, en primer lugar, en el propio Hernández y en su gestión, que ha proyectado ante los espectadores una percepción de pérdida de credibilidad y de manipulación.
Frente a eso, ni la inversión en medios técnicos, incluida la remodelación del plató del ‘Telediario’ con un videowall y una disposición muy similar a la de la competencia, ha conseguido frenar la caída libre.
La herencia de Hernández se lo ha puesto muy difícil a Mamen del Cerro, la nueva responsable de la información pública, secundada por uno de los purgados del sanchismo, por cierto: el número dos será, si nada cambia, Miguel Ángel Idígoras, apartado hasta ahora en el País Vasco tras una brillante trayectoria en Londres o Rabat y visto en la profesión como un gran periodista, con temple y fondo de armario.