El verano provoca que las consultas médicas se "llenen" de manchas solares

Con el calor soporífero, y sus correspondientes rayos de sol, el verano y el aumento de las actividades al aire libre, se hace presente en las consultas médicas la visita de pacientes debido a las manchas solares. Estas pequeñas alteraciones en la piel, causadas por la exposición excesiva al sol, se han convertido en una preocupación creciente para la población en esta temporada.

La dermatología se ha convertido en un campo crucial para la detección y tratamiento de estas manchas, ya que su aparición puede estar asociada a riesgos más graves para la salud cutánea. En esta noticia, exploraremos por qué las manchas solares son el mayor motivo de consulta durante el verano y cómo se pueden prevenir y tratar adecuadamente.

Hay que tener siempre presente el impacto que genera el sol en nuestra piel. La radiación ultravioleta (UV) del sol puede tener efectos perjudiciales en la piel, lo que incluye el desarrollo de manchas solares.

Estas manchas, también conocidas como léntigos solares o pecas solares, son áreas de la piel que se vuelven más oscuras debido a la acumulación de melanina, el pigmento responsable del color de la piel. La exposición prolongada al sol sin protección adecuada puede desencadenar la formación de manchas solares, lo que a menudo ocurre en áreas más expuestas como la cara, los brazos y el escote.

La prevención es otro factor clave si hablamos de manchas solares. Los expertos en dermatología enfatizan la necesidad de utilizar protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) adecuado, así como de adoptar medidas para limitar la exposición al sol durante las horas pico de radiación UV.

La ropa protectora, como sombreros de ala ancha y ropa de manga larga, también puede ser efectiva para minimizar la exposición directa al sol. La educación sobre la importancia de estas prácticas preventivas es esencial para reducir la incidencia de manchas solares.

Tratamientos y consultas médicas

A pesar de las medidas preventivas, muchas personas pueden desarrollar manchas solares durante el verano. En tales casos, la consulta con un dermatólogo se vuelve fundamental. Los dermatólogos están capacitados para evaluar la piel y determinar si las manchas solares presentan riesgos adicionales.

Además, pueden recomendar tratamientos adecuados para reducir la apariencia de estas manchas. Los tratamientos pueden incluir cremas despigmentantes, peelings químicos o procedimientos láser, dependiendo de la gravedad de las manchas y las necesidades individuales del paciente.