Un potencial revolucionario para el tratamiento de enfermedades

Los avances científicos en terapias genéticas han llevado a un creciente interés en el desarrollo de virus artificiales. Estos virus modificados genéticamente pueden ser diseñados para transportar material genético específico a las células del cuerpo, abriendo nuevas posibilidades en el tratamiento de enfermedades genéticas adquiridas.

Un equipo de científicos de la Universidad Católica de América (CUA), en Washington (EEUU), ha diseñado unos vectores virales artificiales a partir de virus que infectan bacterias para mejorar procesos de terapia genética. Son nanomateriales personalizables que podrían evitar la posible memoria de nuestras defensas ante ellos y disponer de una mayor capacidad. Realizar reparaciones para restablecer la salud humana. Estos nanomateriales, según el estudio publicado en Nature Communications, permanecieron estables durante varios meses. El director fundador del Centro de Investigación Médica de Bacteriófagos de la Universidad Católica de América, Venigalla Rao, investigador principal del estudio, ha afirmado que puede aplicarse a una amplia gama de enfermedades genéticas, como la anemia falciforme, la distrofia muscular, la diabetes o cáncer. Claramente, un potencial revolucionario para el tratamiento de enfermedades y mejorar la vida de millones de personas.

En la búsqueda constante de un estilo de vida saludable, la respuesta puede ser tan simple como pasear. Investigaciones recientes revelan que dedicar tan solo 20 minutos diarios a caminar puede reducir hasta un 23% el riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares. Este beneficio radica en el poder que tiene el ejercicio moderado para fortalecer nuestro sistema cardiovascular y mantenerlo en óptimas condiciones. A diferencia de aquellas otras personas obsesionadas por el culto al cuerpo, al ejercicio excesivo y extenuante, quienes eligen caminar pueden evitar el peligro de sufrir un infarto. Ya lo ha dicho un sabio del corazón, el doctor José Luis Zamorano, jefe de Cardiología del Hospital Ramón y Cajal y jefe de equipo de Cardiología del Hospital Ruber Internacional de Madrid, considerado, además, uno de los mejores médicos del mundo, “hacer deporte de manera intensa es comprar papeletas para un infarto”. Como ha publicado El Mundo, de infarto es el currículum de este doctor madrileño.

Existen mecanismos en el organismo que se ponen en marcha cuando una persona se ve envuelta ante un exceso de situaciones. Es el estrés y puede tener graves consecuencias para la salud. Numerosos estudios han demostrado que el estrés crónico puede desencadenar una serie de enfermedades físicas y mentales, como enfermedades cardiacas, trastornos del sueño, depresión, ansiedad y aislamiento. La nutricionista holística Beatriz Larrea dice que el mayor pirómano del organismo es el estrés.

Afortunadamente, existen formas efectivas de combatir el estrés, y una de las más simples y accesibles es la actividad física, pero siguiendo las recomendaciones del cardiólogo nombrado anteriormente. Caminar, pasear o practicar cualquier forma de ejercicio regularmente puede ser altamente beneficioso para reducir los niveles de estrés.

Pero lo último en Japón para combatirlo, es un método o ´sanadora terapia´ como lo llaman en el país del sol naciente, que consiste en llorar. Lo aconsejan los psicólogos: es bueno física y psicológicamente para ayudar a sentirnos bien. Mejora nuestro sistema inmunológico al liberar la tensión y evita algunos problemas de salud. Rui-katsu, que así se llama el invento emocional, significa ´búsqueda de lágrimas´… Me dedicaré a buscarlas entre sollozos y llantos por las esquinas de mi casa.