El día que ‘la Villacís de Levante’ le quitó el protagonismo a su sucesora en Cs

El 2 de febrero era el día escogido para que la nueva portavoz y líder de Ciudadanos, Mamen Peris, se reuniera con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para trasladarle sus propuestas y mostrarle el nuevo giro de la formación, más proclive a tenderle la mano. Sin nada más importante en la agenda política valenciana, Mamen Peris era la protagonista… hasta que Carlos Mazón convocó unas horas antes la presentación de su equipo económico.

Lo que parecía una rueda de prensa más con los colaboradores económicos habituales de Mazón -como los diputados Rubén Ibáñez o José Antonio Rovira- se convirtió en una gran expectación conforme se acercaba la hora de la convocatoria, las 12:00 del mediodía. Llegado el momento, no cabía ni un periodista más en la sala de prensa del PP que hasta tuvieron que traer más sillas. Y es que el rumor de un fichaje gordo se había extendido y nadie quería perdérselo.

Así apareció en la sede del PP la ‘Begoña de Levante’ o ‘Villacís de Levante’, como la bautizaban en un chat pepero, y Carlos Mazón conseguía un gran golpe de efecto. Un efecto que provocaba que nadie se acordara que una hora después la sucesora de Ruth Merino en Ciudadanos, Mamen Peris, tenía un cara a cara con Ximo Puig.

Aunque la llamen ‘Villacís de Levante’, es evidente que hay diferencias entre la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís -que ha sido noticia por su fichaje fallido por el PP- y Ruth Merino. Merino no tiene la proyección y trascendencia nacional de Begoña Villacís, pero ha sido la voz de la formación naranja en la Comunitat Valenciana tras el portazo de Toni Cantó. Un peso pesado cuya marcha al PP deja más débil a Ciudadanos.

La estrategia de Carlos Mazón de fichar el "talento" de Ciudadanos que se queda huérfano de partido tras irse la marca naranja a la deriva y así aglutinar el máximo voto de centro en el PP está surtiendo efecto, y el fichaje de Ruth Merino puede animar a los que ahora tienen dudas a dar el paso. El objetivo más deseable es que al final haya el menor número de listas de Ciudadanos o que las que hayan no tengan referentes de peso para que el PPCV vuelva a ser la casa común del centro derecha y Cs no les reste unos votos necesarios para ganar la Generalitat y los ayuntamientos.

Por ahora, Carlos Mazón va por el camino, a la espera de si cae otro fichaje gordo procedente del Ayuntamiento de Valencia -veremos qué hace ahora Fernando Giner o Rocío Gil, portavoz en la Diputación-, y Mamen Peris se queda sin protagonismo y con un partido que va camino no ya de no llegar al 5%, sino ni siquiera al 3% de los votos que ahora defiende.

Carlos Mazón logró tener protagonismo en los medios de comunicación nacionales con un fichaje que, aunque era previsible, se hizo con oportunidad, tras la decisión de Begoña Villacís de quedarse donde estaba, y todo ello a dos días de la Intermunicipal del PP con Feijóo, la cúpula del PP y los candidatos municipales en Valencia.