Compromís, de “nuestros jefes no están en Madrid” a venderse a la jefa Díaz

"Este bus no está en Madrid, nuestros jefes tampoco", es el eslogan que Compromís ha lanzado con una imagen de Joan Baldoví, su diputado en el Congreso y candidato a la Generalitat Valenciana, proclamado tras la caída de la lideresa Mónica Oltra como la esperanza de la coalición de mantener a su electorado y reeditar el gobierno del Botànic.

Sin embargo, si uno ve las imágenes de la semana pasada en el famoso Domingo de Ramos de la izquierda española, en la que toda ella salvo el núcleo duro de Podemos fue a rendir pleitesía a su nueva lideresa, Yolanda Díaz, parece que sí hay jefa en Madrid para Compromís.

Con Joan Ribó como cabeza de la embajada de Compromís en el acto de Sumar, todos los sectores de la coalición estuvieron representados, desde el ex comunista -Iniciativa, el partido de Oltra- al nacionalista -Més, el antiguo Bloc-, con sus competidores de Esquerra Unida también presentes -en las autonómicas del 28M son rivales al ir EU con Podemos-.

Compromís, una fuerza que procede del nacionalismo de corte fusteriano, que intenta vender que es la voz valenciana frente al centralismo de PP y PSOE o de Podemos, se ha convertido en una pieza fundamental del Sumar de Yolanda Díaz, diluyendo su discurso ante la ambición de la vicepresidenta del Gobierno, y eso no pasa desapercibido ni dentro de la coalición ni fuera de ella.

Con un Compromís pactista con Pedro Sánchez, que no ha logrado su principal promesa como acometer la reforma de la financiación autonómica, o arrancar grandes inversiones para la Comunitat Valenciana, dejando en evidencia su escasa influencia en Madrid -hasta un nacionalista canario saca más-, lo que le faltaba ahora era entregarse ahora en brazos de Yolanda Díaz de una forma tan fácil sin recibir nada a cambio.

Por ello, el runrún interno crece entre los que ya están moviendo la teoría de que “ir con la izquierda española no suma, resta” y los que achacan a la cúpula no consultar a la militancia este entreguismo a Sumar. El sector más nacionalista de Compromís siempre ha sido más reacio a los pactos con fuerzas nacionales, pero Joan Baldoví y cía -de Més, la pata nacionalista de Compromís- esta vez están como niños con zapatos nuevos.

Y mientras Joan Ribó se hace fotos con Yolanda Díaz, y ésta incluso bendijo la candidatura de Joan Baldoví a la Generalitat y se ofreció a apoyarle, dejando con caras de bobos a los dirigentes valencianos de Unidas Podemos, Compromís pierde su discurso ante la evidencia de que sus jefes, o mejor dicho la jefa, sí la tiene en Madrid.