Una plaga de mosquitos deteriora el monumento más bello dedicado a una mujer
Es una de las siete maravillas del mundo y sin embargo corre un serio peligro por un problema de difícil solución
Este mausoleo, el más bello jamás construido, está amenazado por una plaga de insectos Goeldichironomus que tiñen de verde las paredes y cúpulas del edificio con sus desechos.
En las contaminadas aguas del río sagrado Yamuna, que limita con el monumento, ha proliferado un tipo de alga que ha terminado por expulsar de la zona a los peces que se alimentaban de este insecto y mantenían controlada su población. Ahora las larvas se reproducen sin control y están provocando un deterioro considerable en los grabados del mármol y en las piedras preciosas que conforman los motivos florales de sus paredes.
Los operarios del departamento de arqueología de la India advierten de que el problema tiene difícil solución porque eliminar a diario esa especie de moho verde que causan los excrementos de las moscas está estropeando varias secciones del "edificio del amor" que el emperador Shah Jahan mandó construir en honor a su esposa, Mumtaz Mahal, fallecida tras dar a luz en 1631.
La respuesta a este problema pasa por acabar con la plaga de mosquitos, pero para eso hay que poner fin a las 52 cloacas que desaguan directamente en el río y ensucian su caudal. Además, habría que acabar definitivamente con el depósito de fósforo que alimenta a estos insectos y que procede de las cenizas de un crematorio próximo.
Este no es el único problema que amenaza al monumento más representativo y visitado de India: varias asociaciones defensoras del medio ambiente llevan años luchando para proteger el Taj Mahal de la contaminación. El aire cargado con la polución de los coches y de las fábricas cercanas que se abastecen con carbón, está amarilleando su fachada por eso se ha prohibido la circulación de vehículos a menos de 500 metros.
Sin embargo, ni esta medida ni la limpieza con un barro especial que absorbe la contaminación cada dos años, han sido suficientes para poner fin al deterioro de la prueba de amor más grande que jamás ha construido el hombre.