Claves para contratar tu seguro de viajes ideal

A la hora de hacer un viaje de bastantes días o a otro país siempre nos planteamos la necesidad de contratar un seguro pero, ¿Sabes qué hay que tener en cuenta para que cubra realmente todas tus necesidades?

En el siguiente artículo vamos a tratar de dar respuesta a todas tus dudas ofreciéndote las claves fundamentales para que puedas hacerlo sin miedo. Presta atención.

Lo primero que tenemos que tener claro es la fecha de salida y de regreso y el lugar de destino, pues si contratamos un seguro una vez iniciado el viaje no nos cubrirá las incidencias ocurridas antes de la contratación, además de que el precio varía en función de la duración de las vacaciones.

En cuanto al destino (habitualmente España, Europa o Mundo), si vamos a viajar a diferentes lugares se debe tomar como referencia el más lejano pues así se cubren también los anteriores.

Otro factor clave es el límite de días para la contratación, pues algunos, como los de anulación, sólo suelen poderse contraer en los siete días siguientes a la primera reserva. Es decir, si compramos el vuelo pero preferímos esperar para adquirir nuestra estancia de hotel más adelante, deberemos contratar nuestro seguro antes de siete días después de comprar el billete de avión para que nos cubra la posible cancelación del viaje completo.

Si el viaje lo realizan varias personas, en lugar de contratar varias pólizas, puede hacerse un seguro para grupos en el que se incluirá el nombre y el DNI de cada integrante.

La edad es un factor clave. Si tienes más de 65 años es mejor contratarlo sin límite de edad y si vas a viajar con menores podrás incluirles en tu póliza si contratas uno familiar sin tener que pagar más por ellos.

Si tienes una enfermedad crónica debes tener cuidado porque muchos seguros no te aceptarán. En ese caso lo mejor es acudir a uno específico con coberturas de gastos médicos.

En el caso de que te plantees practicar alguna actividad al aire libre, te conviene contratar un seguro deportivo que cubra gastos médicos, un posible rescate o la rehabilitación, pues el seguro estándar no lo hará.