Descubre 5 viajes inolvidables para hacer por carretera
Si te gusta conducir, te proponemos unos viajes inolvidables en cinco puntos repartidos por el mundo
Si eres de los que disfruta conduciendo, tal vez sea una buena idea plantearte unas vacaciones diferentes y hacer un viaje que te permita recorrer paisajes increíbles desde tu coche. Para que termines de decidirte, te presentamos cinco opciones repartidas por todo el mundo. Seguro que te van a seducir.
Tanami Track (Australia)
La zona interior más remota de Australia ofrece muchas opciones para cruzar el desierto, pero el Tanami Track es un clásico. Empieza 20 kilómetros al norte de Alice Springs, en el Red Centre de Australia, y la carretera solo está asfaltada durante los primeros 315 kilómetros, hasta la Tilmouth Roadhouse.
Después, una pista de gravilla bastante cuidada (pero solo apta para todoterrenos, y a veces impracticable tras la lluvia) atraviesa comunidades indígenas remotas como la Yuendemu, y así como cientos de kilómetros de terreno desértico, pasando por macizos y ranchos aislados. Una gran ruta desde el Territorio del Norte y hasta Australia Occidental, cuya mejor época es de junio a septiembre.
Sea to Sky Highway (Canadá)
Conduciendo desde Vancouver, esta ruta corta revela toda la esencia de las costas de la Columbia Británica, con majestuosas vistas del mar y la montaña. Es un viaje que invita a hacer ejercicio, observar fauna, descubrir la rica cultura autóctona de los indios y poner a prueba nuestra valentía en la plataforma mirador de las vertiginosas Brandywine Falls.
Cerca de Howe Sound se puede contemplar la mole del Stawamus Chief, de 700 metros, uno de los monolitos graníticos más grandes del mundo. Es un paraje sagrado para los squamish, y territorio de cría de halcones peregrinos, aunque solo apto para escaladores expertos.
Etosha (Namibia)
Inmenso, fantasmagórico e increíblemente bello, el salar de Etosha ocupa 48.00 kilómetros cuadrados del norte de Namibia. El gran lugar blanco, en la lengua de los ovambo, la tribu local, es el vestigio de un enorme lago que se secó hace miles de años y actualmente es parque nacional protegido.
La conducción por el interior del salar está prohibida, pero hay un sistema de carreteras bien mantenido que bordea el límite meridional del salobral. Desde allí se obtienen grandiosas vistas de su blanca y radiante extensión, y además se accede a las praderas y abrevaderos que atraen a gran cantidad de leones, leopardos, elefantes, jirafas y rinocerontes.
Sicilia
La ruta nos lleva desde la exótica Palermo, hasta los esplendores barrocos de Siracusa, la ciudad más importante del mundo antiguo, y Catania, ennegrecida por la lava. Por el camino también se puede admirar el sorprendente y variado paisaje siciliano, con bucólicas tierras de cultivo, volcanes humeantes y extensas franjas azules de costa. A 80 kilómetros de Palermo, por la A29, el templo griego de Segesta es un rincón mágico. Y siguiendo la ondulante carretera de la costa se llega hasta las ruinas de la antigua Akragas, en Agrigento. El broche de este panorámico itinerario lo pone el teatro griego de Taormina, de perfecta forma de herradura, suspendido entre el cielo y el mar, con fabulosas vistas al amenazador Etna a través de las columnas derruidas.
Karakorum Highway (Pakistán)
Originalmente, la carretera del Karakorum formaba parte de la Ruta de la Seda, y discurre por el puerto de montaña de Khunjerab antes de descender hasta Kashgar. La mayoría de los viajeros empiezan en Gilgit, bordeando la zona de riesgo alrededor del paso Khyber, para luego serpentear al noreste hacia China, a través de los valles altos y secos de la cordillera del Karakórum.