9 pueblos para conocer La Rioja
Además de preciosos campos con viñedos, La Rioja cuenta con numerosos pueblos, monasterios y recintos amurallados que merece la pena visitar.
El otoño es una época ideal para acercarnos a uno de los rincones de nuestro país que merece la pena conocer... y no solo por sus bodegas y sus vinos.
Alfaro-
Villa de fundación romana y ciudad fronteriza durante siglos cuenta con la emblemática Iglesia Colegiata de San Miguel. Esta monumental obra de los siglos XVI y XVII, construida en ladrillo macizo, fue declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional en 1976.
Ezcaray-
En La Rioja Alta se encuentra Ezcaray, considerado primer pueblo turístico de la Comunidad. Esta preciosa villa sobre el Oja es el punto de inicio perfecto para hacer una ruta entre viñedos. Cuenta con un bello conjunto urbano con soportales, plazas porticadas, palacios y algunos edificios de gran importancia como la iglesia parroquial de Santa María la Mayor con un bellísimo retablo mayor hispano-flamenco del siglo XVI. No te olvides de comer en el Echaurren, uno de los restaurantes más reconocidos de España.
Arnedo-
Está considerada la puerta de entrada al valle alto del Cidacos, declarado Reserva Natural de la Biosfera. Merece la pena visitar la colección de icnitas o huellas fósiles de los dinosaurios, así como hacer una excursión al Monasterio de Vico, bello enclave situado sobre el río Cidacos. No te pierdas tampoco el Mirador del Castillo desde el que se puede contemplar de cerca las ruinas del castillo roquero de esta localidad, edificado por los árabes en el siglo X.
Sajazarra-
uno de los pueblos medievales más bellos de La Rioja que además puede presumir de su pasado noble que se refleja en las casas palaciegas como la de los Osorio o la de los Ruiz de Loizaga, un caserón barroco de mediados del siglo XVIII.
Calahorra-
Se trata de una ciudad con gran peso histórico y un urbanismo marcado por la presencia musulmana de más de cuatro siglos y la comunidad judía. No puedes perderte su catedral de estilo gótico tardío; el Museo de la Romanización, con unas 11.000 piezas arqueológicas, entre ellas la famosa Dama Calagurritana, imagen de la capital riojabajeña; o el Museo de la Verdura.
Santo Domingo de la Calzada-
Estrechamente unida al Camino de Santiago, esta localidad se encuentra a los pies de la Sierra de la Demanda y cuenta con un imponente patrimonio arquitectónico encabezado por su imponente catedral tardorrománica y la Plaza de España, escenario en la actualidad de muchas actividades como el Mercado Medieval, en diciembre, y Los Milagros del Santo, en agosto.
Leza de Río-
Muy cerca de Logroño se encuentra esta pequeña población de la que destacan sus casonas hidalgas y la iglesia de Santa María la Blanca, construida en el S.XV en sillería de una sola nave de tres tramos y cabecera ochavada de cinco paños.
Viniegra de Abajo-
Está situado justo en el centro de la comarca riojana de las 7 villas del alto Najerilla y su origen se remonta a la época visigoda. Con apenas 87 habitantes censados, Viniegra de Abajo tiene una extensa agenda de eventos y fiestas a lo largo del año. Entre los lugares que hay que visitar destacan la iglesia Nuestra Señora de la Asunción y varias ermitas.
Briones-
Su patrimonio hace que cuente con un inestimable interés arquitectónico. Merece la pena conocer la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de estilo isabelino; el Palacio del Marqués de San Nicolás, sede del Ayuntamiento; o los restos del castillo de Briones, destruido en el siglo XIII por Fernando III, y del que se conservan restos de la torre del homenaje.