Teresa Ribera carga de nuevo contra Moreno y eleva su insulto de "señorito"
La ministra insiste en lanzar descalificativos al presidente de la Junta al hablar de Doñana y utliza el mayor cinismo para tapar la difusión que hizo del boicot a las fresas de Huelva.
La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha dedicado nuevos descalificativos al presidente de la Junta, Juanma Moreno, dentro de la campaña que ha emprendido contra el Gobierno andaluz por Doñana. Ha sido en el programa de Carlos Alsina en Onda Cero donde Ribera ha vuelto a mostrar su incontinencia cuando se habla del asunto de los agricultores de Huelva y el uso del agua. El presentador le ha preguntado por ese calificativo de "señorito" con el que se refirió a Moreno y ha contestado que estaba "enfadada" cuando lo dijo.
Podría parecer que se iba a disculpar, pero no. Ribera añade que "cree que su actitud es propia de otra época" y lo sufe de 'escalafón' con la intención de desprestigiarlo. "Aquella reacción la hice muy espontánea y enfadada, pero me pareció y me parece todavía que está disparando con pólvora del Rey", ha dicho ante la pregunta de qué es para ella un señorito.
La vicepresidenta justifica estas consideraciones sobre el presidente andaluz en que "en su posición puede hacer y decir cosas con independencia de cuáles sean las consecuencias, porque son consecuencias que paga otro, tanto desde el punto de vista ambiental como presupuestario en caso de que caiga una multa". Y, para Ribera, eso es algo de la realeza y no duda seguir con el foco puesto en Moreno, que ha retratado a la ministra y sus acciones.
Ribera se 'desentiende' del boicot a la fresa
Antes de atacar a Moreno, la ministra ha utilizado todo su cinismo cuando el presentador le ha cuestionado sobre si "era un bulo" la campaña lanzada por una asociación de consumidores alemana contra los frutos rojos de Huelva y, ella, ha salido en defensa de los productores y el uso sostenible del agua, garantizado que "todos los productos cumplen con la reglamentación", por lo que, ha añadido, "no se puede permitir el lujo de que haya nadie, por interés comercial, que emplee este argumento".
Ribera omite que fue ella quien difundió la información sobre el boicot de la asociación a las fresas onubenses en sus redes sociales, en este caso no por interés comercial sino electoral, para eludir, sin disimulo, su responsabilidad sobre las consecuencias que han denunciando los agricultores que piden su dimisión, el propio sector de los frutos rojos o la Junta de Andalucía.
También se ha delatado cuando ha tendido la mano al Gobierno andaluz para dialogar y retirar la ley que permitirá legalizar nuevos regadíos en el entorno de Doñana, después de negarse a comparecer sobre la proposición que se debate en el Parlamento o reunirse con la propia Junta.
Pero es que además ha dejado ver el 'escozor' que el ha producido a los socialistas perder las elecciones municipales ante el PP en la provincia de Huelva y, lejos de respetar la voluntad de los ciudadanos, señala que "quizá se pueda hablar" con el Gobierno andaluz tras los comicios en los que "el señor Moreno Bonilla ya ha conseguido el rédito electoral que quería, hacerse, muy probablemente, con la Diputación de Huelva".