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Mañueco no se calla ante el robo de Sánchez y su negociación oscura con Cataluña

El presidente de Castilla y León tiene claro que igual que la amnistía sirvió para que Sánchez se quedara en la Moncloa ahora busca conseguir la presidencia de la Generalitat para el PSC.

El presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

Publicado por
Raúl Puente

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"No puede jugar con las cartas marcadas con una negociación por detrás, oscura y sin ningún tipo de transparencia", así de rotundo se ha expresado Alfonso Fernández Mañueco este miércoles por la tarde tras un acto en Santiago de Compostela. El presidente de Castilla y León no piensa callar ante ese trato de "financiación singular" que busca el Gobierno de Pedro Sánchez con la Generalitat y que supone, tal y como ha expresado Mañueco, un verdadero robo a su región y al resto.

Y es que el máximo dirigente castellano-leonés tiene claro que "cualquier modelo de financiación singular supone un robo para Castilla y León" y que "rompe la igualdad" ya que los servicios públicos deben ser equitativos para todos los españoles. "Estamos totalmente en contra y lo que vamos a defender, cada presidente, son los intereses de nuestra comunidad autónoma, como hemos hecho siempre, como hacen otros presidentes del PSOE”, ha defendido Mañueco.

Todas las personas que viven en España son iguales en derechos y también en servicios públicos y tienen que tener la misma sanidad, la misma educación, los mismos servicios sociales, la misma atención a mayores...

El dirigente popular ha acusado al Ejecutivo 'sanchista' de dar privilegios económicos a sus socios "radicales y separatistas" a cambio de que los socialistas se hagan con la Generalitat: "Igual que la amnistía sirvió para que Sánchez se atornillara en la Moncloa, ahora busca conseguir la presidencia de Cataluña para el PSC pactando un modelo de financiación singular".


Es por ello que ha lanzado un mensaje hacia María Jesús Montero, ministra que está llevando a cabo esas conversaciones con los independentistas catalanes. Una negociación que Mañueco denuncia "no puede jugar con las cartas marcadas" y que califica como una negociación "por detrás, oscura y sin ningún tipo de transparencia".