Sánchez, encerrado en su búnker monclovita, consuma otro desprecio a España
El presidente no da la cara ante la tensión en Rusia y finalmente Pablo Casado ha tenido que llamarle ante el desplante del Gobierno.
"¡Qué le llame él". Esa es más o menos la respuesta de Moncloa sobre el silencio de Sánchez ante Casado, que lleva exigiendo explicaciones al presidente acerca de la situación en Ucrania varios días, a lo que hay que sumar el más de año y medio de ninguneo. Y como a Casado no le duelen prendas, ha cogido el teléfono para hacerlo y no para solo para reprenderle por su actitud sino para "reiterar todo el apoyo del PP para ejercer sus obligaciones en el marco de la OTAN".
Eso sí, Casado no ha querido pasar por alto el hecho de que Sánchez no haya comparecido en el Congreso de los Diputados, sino que haya delegado en José Manuel Albares, ministro de Exteriores, la responsabilidad de explicar a los españoles la postura oficial de España ante la crisis entre Ucrania y Rusia.
De hecho, le ha instado a que comparezca en el Congreso de los Diputados en aras de la mayor transparencia en esta crisis, solicitud que el Grupo Parlamentario Popular formalizará en las próximas horas.
Asimismo, el líder de la oposición le ha transmitido la importancia de la unidad de acción dentro del gobierno, tal y como está sucediendo en el resto de países europeos, pero que en España se está viendo entorpecida por un Podemos, que se ha enrocado en el 'No a la Guerra' y ha visto en la crisis un filón para atacar a su socio.
Por ello, Casado, ha ofrecido también el apoyo y la experiencia del Partido Popular en el plano internacional, aunque no ha dejado pasar la ocasión de tratar otros temas como los fondos europeos, para los que ha vuelto a proponerle la creación de una agencia independiente y sobre reforma laboral, trasnmitiéndole que su alternativa es la mochila austriaca que es lo que defiende el Banco de España y en un principio defendía Calviño.
Mientras tanto, según la versión de Moncloa, ha trasladado a Casado que el Gobierno mantendrá puntualmente informados a los grupos parlamentarios a través del ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, o del propio presidente del Gobierno si las circunstancias lo hicieran necesario.
En la misma conversación, Sánchez le ha solicitado que deje de poner en duda la gestión de los fondos europeos. El Gobierno entiende que la respuesta de la Comisión Europea debería ser suficiente y que la estrategia seguida hasta la fecha por el PP solo daña la imagen de España.
También le ha pedido el voto favorable o la abstención, para que el Parlamento respalde y convalide el acuerdo alcanzado entre los agentes económicos y sociales y el Gobierno sobre la reforma laboral.
Sánchez no irá al Congreso hasta mediados de febrero
Y es que, tras el fiasco de las imágenes de Sánchez al teléfono y el ninguneo de Biden en la reunión con los altos mandatarios mundiales, el presidente ha preferido refugiarse en su búnker y no exponerse más ante la opinión pública pese a que la tensión entre Rusia y Ucrania sigue creciendo.
Un desplante, no solo a la oposición, sino al conjunto de la ciudadanía, que contempla cómo Sánchez prefiere no acudir al Congreso para resguardarse de las críticas de sus socios, que ya firmaron un manifiesto en contra de cualquier movimiento en la zona.
De hecho, no acudirá al hemiciclo hasta el próximo 16 de febrero, ya que no asistirá a la sesión de control del 2 de febrero, la primera tras el parón navideño por el viaje oficial a Emiratos con motivo de la Expo.
"Necesitamos que sea el presidente del Gobierno, dadas las divisiones del Gobierno, coja toro por cuernos y se dirija a los españoles en el Congreso"
Por ello desde el PP han reiterado que "necesitamos que sea el presidente del Gobierno, dadas las divisiones del Gobierno, coja toro por cuernos y se dirija a los españoles en el Congreso", además mostrar su preocupación porque "hay una cierta irrelevancia de España" en esta crisis, algo que "demostró el comunicado de Biden (presidente de EE.UU) diciendo con quién había hablado, y ".
"Rusia solo entiende el lenguaje de la fuerza"
Pero mientras Sánchez permanece escondido y sin dar explicaciones, la tensión crece en la zona. La vicesecretaria general adjunta de diplomacia de la OTAN, Carmen Romero, ha cargado este miércoles contra Rusia por, a su juicio, haber provocado la crisis con Ucrania y "pisotear" muchos acuerdos internacionales que "ella misma ha suscrito en los últimos 30 años". "Lo que Rusia solamente entiende es el lenguaje de la fuerza", ha señalado.
Eso sí, ha precisado que las tropas de la OTAN no pueden actuar en Ucrania en caso de que se desate un conflicto bélico ya que este país no forma parte de la Alianza Atlántica, si bien ha explicado que la mayor presencia militar desplegada en los países del este por parte de la organización responde al envío de señales a Rusia de que el "coste" de una acción bélica "va a ser inmenso" y para "preservar la paz".
"Lo que estamos intentando hacer pese a que vemos que Rusia se está preparando para un conflicto armado, es todo lo posible para enviar señales a Rusia de que el coste de una acción (de invasión a Ucrania) va a ser elevado", ha alertado.
De hecho, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha sido tajante y ha amenazado con imponer sanciones "personalmente" contra su homólogo ruso, Vladimir Putin, en caso de que invada Ucrania y ha señalado que podría producirse próximamente un movimiento de tropas estadounidenses en el este de Europa.
"Si avanza con todas las fuerzas sería la mayor invasión desde la Segunda Guerra Mundial y podría cambiar el mundo", ha dicho el mandatario, según informaciones de la cadena de televisión ABC.
Al ser preguntado por la decisión que le llevaría a desplegar tropas, Biden ha aseverado que todo dependerá de "lo que Putin haga o no haga", si bien ha insistido en que Estados Unidos no será quien ordene un movimiento de tropas dentro de Ucrania.
"Puede que movamos tropas en las inmediaciones a corto plazo", ha manifestado antes de señalar que esto no sería "una provocación". "No tenemos intención de poner fuerzas de la OTAN o estadounidenses en Ucrania, pero habrá graves consecuencias económicas si Putin se mueve en este sentido", ha aclarado.