ESdiario

Una brillante victoria de Ayuso y del PP que deja a Pedro Sánchez en la UCI

Ayuso ha arrasado en Madrid a Sánchez, a Iglesias y al frentismo. Y su éxito impulsa una alternativa sólida al sanchismo para toda España.

Ayuso, entre Almeida y Casado

Creado:

Actualizado:



Las Elecciones en la Comunidad de Madrid han dado un vuelco al panorama político nacional por la rotundidad de la victoria de y del PP, que provoca un auténtico tsunami: por la reconfiguración del centroderecha con la desaparición de Ciudadanos y por la crisis que genera en el Gobierno y en la izquierda.

Pablo Iglesias desaparece; Podemos se sume en una profunda crisis que amenaza su existencia y Pedro Sánchez se lleva una derrota personal que deja malherido a su Gobierno y a la izquierda. Sus 65 diputados con el 44.73% son aún más meritorios, al competir con otros dos partidos liberales o conservadores y al medirse directamente contra los líderes nacionales de PSOE y Podemos.

La victoria de Ayuso consolida una alternativa nacional sólida a Pedro Sánchez, que ha llevado al PSOE al peor resultado histórico en Madrid; ve hundirse a su socio de Gobierno y pierde el lamentable argumento de que la democracia estaba amenazada en España por la ultraderecha.

El PP no necesita a VOX para gobernar, le sirve con una abstención que también puede darle el PSOE si tan necesario considera aislar al partido de Abascal, un absurdo en general pero en particular de quien pacta con el separatismo vasco o catalán.

La izquierda, a su vez, queda maltrecha: con la mayor participación que se recuerda; ha cosechado su derrota más estrepitosa y ha visto cómo Podemos puede convertirse en el Ciudadanos de “izquierdas”: su líder deja la política y su espacio puede ser ocupado por Más Madrid, la evolución de Podemos, única triunfadora en ese bloque, a quien cabe pedirle que no herede también su dinámica de choque.

La eliminación de Iglesias y el fracaso de Sánchez deben enterrar el frentismo de una izquierda arrasada en Madrid

Pero el gran derrotado ha sido Sánchez y las consecuencias para él van a ser enormes. Con su fracaso y el de Iglesias, sale derrotada también su apuesta por la confrontación, el lenguaje guerracivilista, la España de los bandos y se impone un volantazo hacia los pactos y el diálogo que el país y la sociedad necesitan.

Por último, una brillantísima Ayuso se une a Feijoó y Moreno, de Galicia y Andalucía, como claros emblemas del PP de Pablo Casado, legitimado por estos resultados: su estrategia de absorción de Ciudadanos con un discurso moderado se ha demostrado eficaz, aunque no todo el mundo la entendiera.

tracking